La mejor historia de amor.

Hay relaciones que no están destinadas a estar juntas, la de nosotros no fue así, nuestro amor era correspondido y empezó de la manera más tierna posible...

Era octubre, otro mes más, sólo tú hacías que los días fueron perfectos con sólo sonreír... Me tratabas de lo mejor, era agradable tu compañía, ¿qué más podía pedir? -Ser su novia- pensé. Y mi deseo se cumplió, el 15 de ese mes me pediste serlo, y es que ¿cómo le dices que no al ser más bello del planeta?. No podía ser más feliz, así que accedí a su petición y fue la mejor decisión que pude haber tomado. Si como amigo era fantástico se pueden imaginar como era cuando novios... Tanto amor parecía irreal, pensé que estaba en un sueño y con su presencia me daba cuenta que era muy real.

En el 4to mes llegaron las tristezas, me dijiste que te tenías que ir, pero JAMÁS pensé que China sería tu destino, esto iba más allá de cualquier cosa, incluso más allá de ti y de mi. Para no lastimarnos no volvimos a hablar del tema, seguíamos sonriendo sin pensar en el futuro y el recuerdo de ese día se estaba esfumando cuando llegó el día menos esperado, ya era 23 de agosto, te ibas. Hiciste maletas y no me lo comentaste, nunca nos dijimos adiós solamente nos dimos un abrazo y prometimos no llorar.

Tus estados hacían que mi corazón se pusiera más chiquito:

"Adiós Venezuela, prometo volver por el amor de mi vida"

"Montándome en el avión que destruirá mi primera relación"

"ALGUIEN QUE POR FAVOR DETENGA ESTE AVIÓN, ME QUIERO BAJAR"

Como no me iba a enamorar más si me llamaste llorando y me dijiste: "Estoy en París, te amo, me quiero devolver"

Pero una relación a distancia no serviría y menos con 15.153 km que separaban nuestros cuerpos, así que el 5 de septiembre rompimos con eso tan bonito que nos unía.

Ninguno de los 2 lloro, yo sentí algo muy feo y contuve las lágrimas, al otro día iba con mi hermano a la playa y me saco de la casa porque decía que iba a morir de depresión y todo el camino lloré y tú me dijiste que no habías llorado tanto en un vuelo.

Nunca pusiste un mano encima de mi, me respetaste en todo momento aún y cuando tu reputación sexual era altísima, JAMÁS habías tenido una relación seria y tus amigos una vez me comentaron que yo te había cambiado.Y que manera de cambiarte, recuerdo cuando teníamos 9 meses y me llamaste borracho diciéndome que estabas enamorado de mi y que me jurabas que nunca me habías sido infiel.

No ha pasado ni un año de tu partida y siento el mismo vacío, a veces el nudo que se me forma en la garganta al pensar en ti no me deja respirar y las lágrimas por las noches no me dejan dormir en paz pero, ¿sabes? aprendí a vivir sin ti, no es mi deporte favorito pero debo hacerlo, vi nuestra relación como ese regalo de navidad que siempre había esperado y lo disfrute, fui feliz, soy feliz. Supuse que no nos veríamos más, hasta que la semana pasada las palabras de tu mamá hicieron que mi corazón se saliera por la boca y gritara de felicidad:

"Luis viene a Venezuela, se quedará un mes"

Por eso ésta será, la mejor historia de amor separada por un boleto con destino a Hong Kong.